miércoles, 17 de septiembre de 2014

Estoy ardiendo

Estoy ardiendo por los cuatro costados,
he entregado  días y sueños y mis libros
a este fuego que tú has prendido.
Estoy ardiendo por entero
a la vista de todos en la plaza,
mientras tú observas mi holocausto
desde la altura imposible de tu sonrisa.
Escritos, memorias, amigos, recuerdos,
todo arrojado a la hoguera donde mi culpa
se consume y sublima según tu venganza.
Estoy ardiendo hasta los tuétanos
en una llamarada purificadora
que limpiará tu memoria, tan atenta
a conservar agravios y desdenes míos.
Pero mis cenizas no serán abono
donde puedas cultivar nuevos sueños,
este fuego no traerá la paz que tanto necesitas.
Tu rencor es duradero
y acabará contigo a fuego lento.
Es esto lo que grito desde la pira que me incendia,
es este mi beso último, no a tus labios,
sino a tu conciencia. Me sacrificas
sobre un altar de celos incansables.
La desconfianza torpe, los celos de vuelo corto,
son dioses menores que nunca están satisfechos.


pepegarciaresille@gmail.com
Tiempos nuevos
Sevilla, 2 de septiembre de 2014

2 comentarios:

  1. La escena que cuentas, me parece reconocerla, le pones detalles que me hacen sentirla. La imagino continuamente repetida en cada pareja destruida por el abandono, la desidia. Parece mi propia historia comprimida...

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  2. Maravilloso!!! Sentir el dolor del alma, con solo leer tus palabras, me eriza la piel.

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