Corazón preso
No estabas conmigo, era definitivo.
Aquella jaula era el fin del mundo.
Mi corazón decía: “No vayas, no
vayas”
Pero no siempre me llevo bien con él,
y quedó atrapado, no era una prisión
cualquiera,
era una jaula dorada. Desde allí me
llama,
me grita, maldice mi cobardía
desde todas las tardes de mi vida...
Me llama,me maldice,
saca a la luz esta flaqueza mía.
Sólo el dolor justifica esta mierda.
En una jaula...
Ahí lo tengo, a la interperie,
a la vista del mundo, solito,
desnudo ante cualquiera,
como si no fuera mio...
No siempre tengo valor, le digo,
no sabéis por qué esta mañana
arranqué mi corazón y lo eché al
olvido.
Pero mi corazón es paciente,
y sabe de este dolor que me atenaza...
no quiero irme de esta vida
sin llevármelo conmigo.
Él lo sabe. Y me dice: “ sólo se
vive
con el corazón”
Sólo queda la esperanza
sevilla, 25 de mayo de 2014
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